Gladys vargas Daza..
ARGUMENTACIÓN "LIBROS: ¿QUIEN SE A LLEVADO MI QUESO?...Y LA CULPA ES DE LA VACA"
El que mas me llamo la atención por su contenido fue Quien se a llevado mi queso...Me parece muy interesante la forma como nos hace reaccionar con referencia a nuestra manera cotidiana de pensar y consecuentemente de actuar. Este libro es una pieza muy importante para todos los que siempre temen los cambios y no se arriesgan al cambio temiendo que puede ser un fracaso.
Para mí, en particular me enseña muchas, cosas ademas me ha puesto en la tarea de revisar la forma como desarrollo mi trabajo y me da aliento que si en algo fallo esto solo es parte del proceso, pero que por nada del mundo así donde este, las cosas marchen bien siempre debo estar atenta y buscando un plan B.
Es una fuerte ayuda y una herramienta adicional para todos y cada uno de aquellos grandes triunfadores y soñadores que buscan día a día ser mejor y estar en mejores condiciones, tanto a nivel social como económicamente.
Creo que este tipo de material es para sacarle el mayor provecho, y se debe leer por lo menos una ves por mes. Para aplicar mejor en nuestra vida esa gran enseñanza que nos aporta para incentivarnos al cambio y a la búsqueda constante de un queso nuevo para degustar.
EXPO: EFECTIVIDAD, EFICACIA Y EFICIENCIA.
EFECTIVIDAD
La efectividad es la capacidad de lograr un efecto deseado,
esperado o anhelado. En cambio.
Cuando se habla de efectividad, se
está haciendo referencia a la capacidad o habilidad que puede demostrar una
persona, un animal, una máquina, un dispositivo o cualquier elemento para
obtener determinado resultado a partir de una acción. La eficacia tiene que ver
con optimizar todos los procedimientos para obtener los
mejores y más esperados resultados. Por lo general, la eficacia supone un
proceso de organización, planificación y proyección que
tendrá como objetivo que aquellos resultados establecidos puedan ser
alcanzados.
La palabra efectividad adquiere su
origen del verbo latino “efficere” que quiere decir ejecutar, llevar acabo u
obtener como resultado. Cuando un individuo practica la efectividad en su
trabajo, su tiempo rinde mucho mas y sus niveles de bienestar aumentan, ya que
este sentirá que esta cumpliendo con sus labores cotidianas de forma eficiente.
Según la ley de la efectividad, este hábito se adquiere al equilibrar la
producción y la capacidad para producir. De esta forma, tanto los gerentes como
el personal a su cargo, podrán obtener un mayor beneficio del esfuerzo y de las
horas de trabajo que invierten a diario en la empresa
EFICACIA
La
eficacia es la capacidad de la causa eficiente para producir su efecto. Capacidad de lograr los objetivos y metas
programadas con los recursos disponibles en un tiempo predeterminado. Capacidad
para cumplir en el lugar, tiempo, calidad y cantidad las metas y objetivos
establecidos.
El
término de eficacia se aplica principalmente a ámbitos en los que las acciones
tienen que tener resultados específicos y controlados, tal es el caso de los
ámbitos empresariales y comerciales. En este sentido, la eficacia de una acción
buscará en primer término acceder a los recursos, métodos y procedimientos
apropiados que generen las mejores consecuencias para la actividad específica.
EFICIENCIA
La
eficiencia como la relación entre los recursos utilizados en un proyecto y los
logros conseguidos con el mismo. Se entiende que la eficiencia se da cuando se
utilizan menos recursos para lograr un mismo objetivo. O al contrario, cuando
se logran más objetivos con los mismos o menos recursos. Proviene del latín efficientia que en español
quiere decir, acción, fuerza, producción.
Uso racional de los recursos con que se cuenta
para alcanzar un objetivo predeterminado. A mayor eficiencia menor la cantidad
de recursos que se emplearán, logrando mejor optimización y rendimiento.
En resumen la eficacia se mide en condiciones optimas, la efectividad se
mide en condiciones habituales, y la eficiencia es la única que tiene en cuenta
los costes de las inversiones.
EFICACIA Y EFICIENCIA
“La eficiencia es muy
importante. Sin ella, no habría organizaciones; con ella hay menos
organizaciones...los expertos en eficiencia están más contentos cuando hay
menos costos, incluso si esto implica que haya menos clientes..”.- Minztberg.
La eficiencia es un “paradigma importado” de la teoría económica, que ha
orientado el trabajo de las organizaciones y sus dirigentes durante décadas,
desde los trabajos de los economistas clásicos, Adam Smith y David Ricardo a
mediados del siglo XVIII. Su planteamiento esencial es la relación entre
insumos (gastos) y resultados (ingresos), su expresión es la reducción de los
costos, o los costos mínimos. Tiene una lógica contundente, usted tiene que
“producir con los costos más bajos posibles”, o dicho de otra forma, “obtener
los mayores resultados con los mismos recursos (gastos)”.
La
eficiencia actúa en el ámbito interno de la empresa, ahí es donde usted puede
trabajar para reducir sus gastos. Pero ¿qué pasa en un entorno turbulento? se
preguntan los especialistas, donde usted tiene que estar al tanto de lo que
está pasando “afuera” de la empresa, para ajustar sus estrategias y acciones de
manera que pueda aprovechar las oportunidades o neutralizar las amenazas que se
presenten.
Ante esto, Drucker dice “No basta con
hacer las cosas correctamente (eficiencia), hay que hacer las cosas correctas
(eficacia)...”. Menguzzato, especialista española, en su libro sobre
Dirección Estratégica expresa: “...la
experiencia demuestra que el éxito y supervivencia a largo plazo de la empresa
depende más de los progresos en su eficacia que en su eficiencia...”.
La
eficiencia hace énfasis en: los medios, hacer las cosas correctamente, resolver
problemas, ahorrar gastos, cumplir tareas y obligaciones, capacitar a los
subordinados, aplica un enfoque reactivo.
La eficacia (o efectividad) hace énfasis en: los resultados, hacer las cosas
correctas, lograr objetivos, crear más valores (principalmente para el
cliente), proporcionar eficacia (empowerment) a los subordinados, aplica un
enfoque pro activo, es decir, en lugar de reaccionar, anticiparse.
La eficiencia se concentra en cómo se hacen las cosas, de qué modo se ejecutan.
La eficacia en: para qué se hacen las cosas, cuáles son los resultados que se
persiguen, qué objetivos se logran. La pregunta básica de la eficiencia es
¿Cómo podemos hacer mejor lo que estamos haciendo?. La de la eficacia es: ¿Qué
es lo que deberíamos estar haciendo?.
En el proceso de formulación de la estrategia de una empresa el enfoque que
debe prevalecer en la formulación de objetivos y estrategias es el de la
“eficacia”. El enfoque de la eficiencia “entra” en el momento en que se definan
los planes, los presupuestos y las acciones para poner en práctica la
estrategia. La eficacia se centra en el “¿Qué?”, la eficiencia en el “¿Cómo?”.
Cuando trabajo el tema, en talleres o consultarías me gusta utilizar un
pensamiento de José Martí, el Héroe de la Independencia de Cuba, considerado
con justicia uno de los pensadores latinoamericanos más notables del XIX cuando
expresó:
“Emplearse en lo estéril,
cuando se puede hacer lo útil;
ocuparse de lo fácil,
cuando se tienen bríos para intentar lo difícil;
es despojar de dignidad al talento.
Centrarnos
en la eficiencia puede conducirnos a “bajar costos a toda costa”. Basta con
recorrer todo el proceso de la empresa y determinar dónde “debemos” rebajar los
costos. Trabajar por la eficacia es más difícil, hay que pensar en lo que
sucede afuera, en cómo generar valor para los clientes, y con esto, para la
propia empresa, qué tendencias podemos avizorar, qué está haciendo la
competencia, entre otras cuestiones.
Cuando se comentaron las tendencias en el marketing, en artículo anterior, se
mencionó cómo: la atención personalizada, el servicio de postventa, la
satisfacción, el producto “ampliado”, el valor que perciben, son cosas que los
clientes aprecian mas que “el precio más bajo”. La gente prefiere comprar una
computadora más cara, si puede contar con una red de mantenimiento y atención,
que otra más barata, en una empresa que no le garantice lo demás.
De lo que se trata es de tener claro a qué debemos darle prioridad en el
momento de definir nuestra estrategia, de identificar qué es lo que debemos
estar haciendo, antes de ocuparnos de cómo hacemos, lo que estamos haciendo. Un
especialista presenta un enfoque interesante, en el que integra ambos enfoques
cuando define la “Nueva fórmula del Éxito”, de la siguiente forma:
Éxito = Eficacia (Efectividad) + Eficiencia + Innovación y cambio
¿Cuál es la
lógica de esto?
Sencillamente, que la empresa debe:
·
primero, identificar qué es lo más
conveniente que debe hacer (para aprovechar una oportunidad o neutralizar una
amenaza);
·
después, tratar de hacerlo de la forma más
eficiente posible (con el mínimo de gastos):
·
pero, no se puede limitar a esto, la
competencia puede estar haciendo lo mismo, por tanto, debe tratar de innovar
constantemente, de crear nuevas formas de satisfacer necesidades y generar
productos y servicios de alto valor para el cliente.
DIFERENCIA ENTRE EFICACIA Y EFICIENCIA
Ejemplo
eficiencia: se es eficiente cuando en 12 horas de trabajo se hacen 100 unidades
de un determinado producto. Ahora, se mejora la eficiencia si esas 100 unidades
se hacen en sólo 10 horas. O se aumenta a eficiencia si en 10 horas se hacen
120 unidades. Aquí vemos que se hace un uso eficiente de un recurso (tiempo), y
se logra un objetivo (hacer 100 o 120 productos)
Ejemplo eficacia: se es eficaz si nos hemos propuesto construir un
edificio en un mes y lo logramos. Fuimos eficaces, alcanzamos la meta.
La eficacia difiere de la eficiencia en el sentido que la
eficiencia hace referencia en la mejor utilización de los recursos, en tanto
que la eficacia hace referencia en la capacidad para alcanzar un objetivo,
aunque en el proceso no se haya hecho el mejor uso de los recursos.
Podemos ser eficientes sin ser eficaces y podemos ser eficaces sin
ser eficientes. Lo ideal sería ser eficaces y a la vez ser eficientes.
COMO SER EFICIENTE
Para lograrlo, es importante tomar en cuenta los
siguientes aspectos:
- Administración del tiempo y planificación
- Establecimiento de prioridades
- Respuesta rápida a preguntas y asignaciones
- Sistema de archivo transparente en papel y
electrónico
- Orden y estructura en el lugar de trabajo
- Trabajo en equipo eficiente, incluyendo
reuniones.
CARACTERÍSTICAS PARA SER EFICIENTE
Además, existen una serie de características, que a
continuación se presentan, que contribuyen para que un empleado sea eficiente.
Aprender
a decir "no". Existen personas que siempre dicen "sí" a todos los
proyectos o tareas que se les asignan y luego, no pueden terminar adecuadamente
estos proyectos y, por ende, quedan mal.
No
revisar su correo electrónico personal en la mañana. Es mejor revisarlo
al final del día o en casa. Tampoco resulta conveniente chatear o
revisar facebook u otros sitios de reuniones virtuales durante horas laborales.
Planificar
su trabajo o tareas en papel, ya sea en el ordenador, agenda electrónica o celular). Luego es necesario clarificarlo por orden de
prioridades.
Conocer
el ritmo de trabajo de su mente. Si resulta fácil realizar las tareas
más difíciles por la mañana, es necesario, entonces, realizaras apenas se
llega a la oficina.
Sacar
tiempo para lo menos importante. Existen actividades que siempre se dejan para el
final porque no nos gustan o porque nunca son la prioridad del día (como
archivar, pagar cuentas o hacer reportes), pero se van acumulando y
eventualmente explotan causando grandes atrasos o
consecuencias, Por ello, se debe marcar un día específico en
la agenda, y que ese día sean prioridad, o asignarles una fecha tope.